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lunes, 29 de agosto de 2016

Empieza el ataque al movimiento escéptico hispano



Desde hace unos años, se ha puesto de moda criticar el movimiento escéptico — la tendencia existe en las sociedades anglosajonas, así que sólo era cuestión de tiempo para que ocurriera con el escepticismo en español (con el disfraz de una nota de prensa, en todo caso; pues los ataques personales, los blogs anti-debunkers y las difamaciones a los escépticos en español son la reacción casi por defecto de quienes no tienen las evidencias para defender una creencia irracional a la que le tienen afecto, o de la que viven).

En este caso, la nota anti-escéptica fue escrita por un tal Fermín Grodira para El Confidencial, donde acusa a los escépticos de arrogantes, maniqueos y endogámicos (y sólo vamos en el título). Grodira no escatimó en cargos contra el movimiento, así que hago un intento por agrupar sus acusaciones (y más o menos tratar de darles sentido):

domingo, 11 de septiembre de 2011

11-S y acabando con la conspiranoia Zeitgeist

Creo que me vi Zeitgeist en el momento indicado. Estaba yo empezando a aceptar que el mejor -y único- camino para conocer la verdad son la Ciencia y la Razón y se cruzó ese asqueroso pedazo de pseudodocumental conspiranóico, criptofascista y neoliberal en mi camino y tras perder cuatro horas de mi vida (porque también me vi Addendum) me puse a investigar si eran verdad las afirmaciones fatalistas y apocalípticas de ese producto de un nerd con un conocimiento básico de Movie Maker, difusor de falacias económicas, y propagador del miedo que responde al nombre -falso- de Peter Joseph.

Por supuesto, nada de lo que dice es cierto. Es más, creo que por cada tres palabras de los largometrajes, hay cuatro mentiras. Pero no llegué solo a esas conclusiones. De hecho me pasé una buena cantidad de días leyendo los largos artículos que Natsufan y Chemazdamundi se dejaron la piel para escribir y probar lo inmensamente falsos que resultan los pseudodocumentales.