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jueves, 30 de abril de 2020

Planet of the Humans, el malthusianismo reciclado de Michael Moore



Oh-oh, hoy traigo malas noticias: el 20 de abril de 2020, el Día de la Tierra, Michael Moore estrenó oootra película, Planet of the Humans (El Planeta de los Humanos), que ha liberado gratuitamente en YouTube. La cinta, escrita y presentada por Jeff Gibbs (Moore es el productor ejecutivo, junto con Ozzie Zehner), pretende ser un documental que critica al movimiento ambientalista y su entusiasmo por las energías renovables.

Y, como no sorprenderá a nadie medianamente informado en el mundo, Planet of the Humans tiene todas las señas de identidad de un 'documental' de Michael Moore: desinformación, mentiras, medias verdades, difamación, tergiversaciones, golpes de efecto y una conclusión preestablecida con base en la cual se alinean todas las afirmaciones de la película.

En resumen, Planet of the Humans es una hora y cuarenta minutos de monserga moralista sobre lo inefectivas que son las energías renovables y la conclusión de que la única solución posible es un estricto control poblacional y limitar el consumismo... ese sueño húmedo de algunos occidentales opulentos que creen que hay virtud en pasar necesidades y vivir en estados de precariedad.

jueves, 21 de noviembre de 2013

La desventaja de la energía eólica



Todo tipo de energía tiene sus costos y la energía eólica no es la excepción.

martes, 23 de abril de 2013

Defensores de lo orgánico deberían amar los transgénicos



Después de leer The Infinite Resource: The Power of Ideas on a Finite Planet, de Ramez Naam, Keith Kloor retoma una idea del libro y le da forma, explicando que los defensores de lo orgánico deberían amar los transgénicos, en vez de lo orgánico:

sábado, 16 de marzo de 2013

Las abejas no morirán



¿Recuerdan la mentirosa campaña para "salvar las abejas"?

Pues fracasó rotundamente, algo que al parecer tiene molestos a los editores ambientales del Guardian:

viernes, 15 de marzo de 2013

Desventajas de la de-extinción



National Geographic y TEDx están llevando a cabo un evento sobre la De-extinción, la posibilidad de volver a traer a la vida especies ya extintas.

La postura conservacionista ortodoxa es fácil de entender, sin embargo, Keith Kloor ha escrito un post preguntando si la de-extinción es buena que invita a la reflexión.

martes, 12 de febrero de 2013

El aborto es eco-amigable - Doug Stanhope



sábado, 5 de enero de 2013

Discurso de Mark Lynas en Conferencia Agrícola de Oxford 2013



Esta es la traducción del discurso de Mark Lynas del tres de enero del 2013, dado en el marco de la Conferencia Agrícola de Oxford.

miércoles, 8 de agosto de 2012

La religión verde

Infortunadamente, los que nos preocupamos por el medio ambiente y por buscar soluciones reales a problemas como el cambio climático, nos encontramos en el mismo terreno que personas que ven han adoptado a "la madre naturaleza" (?) como su dios.

Para James Gray, el dogma anticientífico está dañando el ambientalismo:

miércoles, 13 de junio de 2012

Etiquetar OGM es malo para las personas y el medio ambiente

Si el tema de los transgénicos les ha parecido tan interesante como me lo ha parecido a mí, probablemente sepan que hay quienes quieren etiquetar los alimentos transgénicos.

David Zilberman, profesor de agricultura y economía de los recursos, explica por qué el etiquetado es una mala idea:

martes, 1 de mayo de 2012

Cómo no luchar por los recursos naturales

El Gobierno colombiano no se caracteriza por respetar el medio ambiente ni interesarle su preservación. Es más, todo apunta a que carece de asesores serios (o asesores en lo absoluto) en esta materia.

Así que la lucha por la conservación de los recursos naturales y contra la sobreexplotación es una que debemos asumir los ciudadanos, a falta de Estado.

Pues resulta que los intentos de hacerlo están pésimamente encaminados:

domingo, 22 de abril de 2012

Soy un ambientalista moderno

En muchas ocasiones he criticado a Greenpeace, he defendido los transgénicos y la energía nuclear, así como he atacado el gaiacentrismo - la idea de que hay que poner la naturaleza en un pedestal.

A primera vista, no paso por muy ecologista que digamos. Lo que pasa es que mi ambientalismo no es ludita, ni tiene cargo de conciencia por ser humano. El mío es el ecologismo moderno, apoyado en la ciencia. Este concepto está explicado magistralmente Keith Kloor:

martes, 14 de febrero de 2012

Ecocentrismo, ambientalismo feudal

El posmodernismo es como una paloma: a donde va, la caga. Ni siquiera el ambientalismo ha escapado de sus asquerosas fauces.

Convencidos de poner en un pedestal 'lo natural' y postrarse ante ridículas ideas religiosoides sobre la naturaleza, los posmodernos están ayudando a acabar con esa naturaleza a la que tanta pleitesía le rinden:

domingo, 29 de enero de 2012

Ya sé cuál será el próximo paso de Greenpeace

Los eco-talibanes de Greenpeace, siempre toman posiciones fáciles, buenrollistas, sin importar si son científicas o anticientíficas. Lo que sea para quedar bien.

Así como tienen campañas contra el cambio climático, también se han metido en cruzadas anticientíficas como la que libran contra la energía nuclear o contra los transgénicos. Ignoran la ciencia, y siguen cómodos con su pereza intelectual.

Por eso no es de extrañar que prontamente se opongan a la investigación y desarrollo sobre el gen que podría acabar con el hambre en el mundo:

jueves, 11 de agosto de 2011

Petardo Antinuclear

Es triste ser testigo de cuándo la publicidad anticientífica se cuela en los discursos de los primeros ministros y presidentes. Como colombiano, no tengo grandes expectativas en cuanto a que 'mis' representantes digan burradas científicas. Los EEUU deben estar más que acostumbrados a las sandeces del creacionismo y de que reducir el gasto público los sacará de la deuda.

Pero en raras ocasiones un presidente que uno esperaría que tuviera más preparación y cimientos científicos se pone en ridículo de una manera tan natural. Esta vez le correspondió al alcalde de Nagasaki, Tomihisa Taue, durante la conmemoración del bombardeo a esa ciudad:

domingo, 17 de julio de 2011

La Triste, Triste Caída de Greenpeace

En un excelente artículo de JM Mulet, cuya lectura recomiendo, me entero de un artículo de Wilson da Silva sobre la triste, triste caída de Greenpeace:

martes, 21 de junio de 2011

Incoherencias del Sexo en las Iglesias

Los caminos de dios son inescrutables. Tal vez eso explique por qué el actuar de su club de fans también es completamente incoherente e hipócrita.

La Iglesia Católica se negó a colaborar con la justicia civil cuando empezaron a aparecer los casos de pederastia y cerró filas en torno a sus más asquerosos y repugnantes miembros.

Sin embargo, cuando se trata de dos adultos que tienen relaciones sexuales consensuadas en el lugar donde bien pudo haber sido violado un monaguillo, los feligreses y los curas sentaron su voz de inconformismo:

lunes, 11 de abril de 2011

Desagravio a la Energía Nuclear


Tras el incidente de Japón, numerosos medios de comunicación se dedicaron a esparcir el terrorismo mediático sobre la radiación de Fukushima.

Pero es hora de dejar que los expertos y científicos hablen.

Una vez superado el momento de la tragedia y haciendo el cálculo de los daños y riesgos, la ONU ha determinado que Fukushima no es un riesgo serio para la salud:


Científicos de Naciones Unidas dijeron que era poco probable que los problemas de la planta nuclear de Fukushima, en Japón, se tradujeran en serios problemas de salud.


Pero el Comité Científico de la ONU sobre los Efectos de la Radiación Atómica (UNSCEAR, por sus siglas en inglés), reconoció que una evaluación en profundidad de los efectos del accidente sobre la salud humana y en el medioambiente requerirá de al menos dos años.


Wolfgang Weiss, un experto en radiación nuclear de la ONU y director de UNSCEAR, dijo sin embargo que el océano pacífico estaba absorbiendo la mayor parte de la contaminación.


Weiss también dijo que el accidente era mucho menos grave que el desastre nuclear de Chernobyl, ocurrido en Ucrania hace 25 años.


El científico, sin embargo, reconoció la situación de Fukushima era más seria que la originada por los problemas del reactor nuclear de Three Mile Island, Estados Unidos, en 1979.

Y es curioso porque además Japón le pidió a los medios extranjeros menos sensacionalismo sobre la crisis nuclear:

El Gobierno japonés pidió a los medios extranjeros que eviten el sensacionalismo a la hora de informar sobre el accidente nuclear de la planta de Fukushima, alegando que algunas noticias se han basado en datos incorrectos.

El viceministro de Asuntos Exteriores de Japón, Chiaki Takahashi, dijo que algunas noticias en la prensa internacional sobre la crisis de Fukushima han sido "excesivas" y por ello las misiones diplomáticas de Japón han pedido a las compañías responsables que las corrijan y sean más rigurosos.

Según Exteriores, algunos medios y tabloides se han centrado en el peligro que supone la radiación que emana de la central nuclear utilizando proyecciones "exageradas".

Pues bien, hasta aquí era lo presumible: detrás de esto está el bloque anti-nuclear que cuenta con cierto favoritismo en el escenario internacional.

Sin embargo resulta que el mayor ambientalista del Reino Unido, George Monbiot, denuncia la actitud de los ambientalistas anti-nucleares, que aprovecharon la catástrofe de Japón para dar rienda suelta a su agenda política dentro de los medios. En su columna de The Guardian -que fue republicada en su blog-, anota:

El movimiento verde ha engañado al mundo acerca de los peligros de la radiación.
...
Empecé a ver la magnitud del problema después de un debate la semana pasada con Helen Caldicott. La Dra. Caldicott es la activista anti-nuclear más importante en el mundo. [...] En el debate ella hizo algunas declaraciones sorprendentes sobre los peligros de la radiación. Así que hice lo que cualquier persona enfrentada con afirmaciones científicas cuestionables debe hacer: Pedí las fuentes. La respuesta de Caldicott me ha sacudido profundamente.

Primero me envió nueve documentos: artículos de prensa, comunicados de prensa y un anuncio. Ninguno era una publicación científica; ninguno contenía fuentes de las afirmaciones que había hecho. Pero uno de los comunicados de prensa se refería a un informe de la Academia Nacional de Ciencias de EE.UU., que ella me instó a leer. Lo he hecho - me leí todas las 423 páginas. No apoya ninguna de las declaraciones que he cuestionado: de hecho, contradice fuertemente sus afirmaciones sobre los efectos de la radiación en la salud.

La presioné aún más y me dio una serie de respuestas que hicieron que mi corazón se sumiera - en la mayoría de los casos se referían a publicaciones con ningún o muy poco nivel científico, que no apoyaban sus declaraciones o que las contradecían. (He publicado nuestra correspondencia, y mis fuentes, en mi sitio web). Acabo de leer su libro Nuclear Power Is Not the Answer (La Energía Nuclear No Es la Respuesta). Me sorprende la escasez de referencias a artículos científicos y la abundancia de reclamos sin fuente que contiene.

Pero se pone peor, mucho peor. Durante los últimos 25 años, los activistas anti-nucleares han estado acumulando las cifras de muertes y enfermedades causadas por el desastre de Chernobyl, y desfilando bebés deformes como un circo medieval. Ahora alegan que 985.000 personas perdieron sus vidas por Chernobyl, y que continuará masacrando personas de las generaciones venideras. Estas afirmaciones son falsas.

El Comité Científico de las Naciones Unidas sobre los Efectos de la Radiación Atómica (UNSCEAR) es el equivalente del IPCC, Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático. Al igual que el IPCC, se pide a los principales científicos del mundo que evalúen miles de trabajos y produzcan una visión general. Esto es lo que dice acerca de los efectos de Chernobyl.

De los trabajadores que trataron de contener la emergencia de Chernobyl, 134 sufrieron el síndrome de radiación aguda, 28 murieron poco después. Diecinueve otros murieron más tarde, pero en general no a causa de enfermedades asociadas a la radiación. Los 87 restantes han sufrido otras complicaciones, incluidos cuatro casos de cáncer sólido y dos de leucemia. En el resto de la población, se han producido 6.848 casos de cáncer de tiroides entre los niños pequeños, que surgen "casi en su totalidad" del fracaso de la Unión Soviética para evitar que la gente bebiera leche contaminada con yodo 131. De lo contrario, "no ha habido ninguna evidencia convincente de efectos de salud en la población general que puedan atribuirse a la exposición a la radiación." Las personas que viven en los países afectados hoy "no es necesario que vivan con el temor de las consecuencias graves de salud del accidente de Chernobyl".

Caldicott me dijo que el trabajo del Comité Científico sobre Chernobyl es "un completo encubrimiento". A pesar de que la he presionado para que se explique, ella aún no ha proporcionado ni una pizca de evidencia para esta afirmación.

En una columna la semana pasada, el editor del medio ambiente de The Guardian, John Vidal, denunció airadamente mi posición sobre la energía nuclear. En una visita a Ucrania en el 2006, él vio "bebés deformados y mutados genéticamente en las salas ... adolescentes con retraso en el crecimiento y torsos de enano; fetos sin piernas o sin dedos". Lo que no vio fue evidencia de que esto estaba relacionado con el desastre de Chernobyl.

El profesor Gerry Thomas, quien trabajó en los efectos de Chernobyl de UNSCEAR, me dice que no hay "ninguna evidencia" de un aumento de defectos de nacimiento. El documento de la Academia Nacional que la Dra. Caldicott me instó a leer llegó a conclusiones similares. Se encontró que la radiación inducida por la mutación en el esperma y los óvulos es un riesgo tan pequeño "que no se ha detectado en seres humanos, incluso en poblaciones irradiadas estudiadas a profundidad como las de Hiroshima y Nagasaki".

Así como John Vidal y muchos otros, Helen Caldicott me recomendó un libro que afirma que 985.000 personas han muerto como consecuencia de la catástrofe. Traducido del ruso y publicado por los Anales de la Academia de Ciencias de Nueva York, este es el único documento que se ve como científico y parece apoyar las afirmaciones hechas por los ambientalistas sobre Chernobyl.

Una revisión devastadora en la revista Radiation Protection Dosimetry señala que el libro logra su cifra por el método extraordinario de asumir que todas las muertes que aumentaron de un amplio rango de enfermedades -incluyendo muchas que no tienen ninguna relación conocida con la radiación- fueron causadas ​​por el accidente. No hay ninguna base para este supuesto, entre otras razones porque en muchos países la detección ha mejorado dramáticamente después de la catástrofe y, desde 1986, ha habido grandes cambios en el antiguo bloque del Este. El estudio no hace ningún intento por relacionar la exposición a la radiación con la incidencia de la enfermedad.

Su publicación parece haber surgido de una confusión acerca de si los Anales era una editorial o una revista científica. La academia me ha dado esta declaración: "En ningún sentido los Anales de la Academia de Ciencias de Nueva York o la Academia de Ciencias de Nueva York comisiona este trabajo, ni con su publicación pretendemos validar de manera independiente las afirmaciones hechas en la traducción o en las publicaciones originales citadas en el trabajo. El volumen traducido no ha sido objeto de ninguna revisión por pares hecha por la Academia de Ciencias de Nueva York, o por cualquier otra persona".

No proporcionar fuentes, refutar los datos con anécdotas, elegir estudios a conveniencia, despreciando el consenso científico, invocar una operación de encubrimiento para explicarlo: todo esto es horriblemente familiar. Estos son los hábitos de los negadores del cambio climático, contra el que ha luchado valientemente el movimiento ambientalista, llamando a la ciencia en su ayuda. Es doloroso descubrir que cuando los hechos no les convienen, los miembros de este movimiento recurren a las locuras que han denunciado.

Tenemos la obligación de basar nuestros juicios en la mejor información disponible. Esto no es sólo porque se lo debemos a otras personas para representar los problemas de manera justa, sino también porque nos lo debemos a nosotros mismos para no desperdiciar nuestras vidas en cuentos de hadas. Un gran error ha sido hecho por este movimiento. Tenemos que corregirlo.